es un champú diseñado especialmente para restaurar y proteger el cabello dañado y tratado químicamente. Su fórmula enriquecida con extracto de semilla de chía, proteínas vegetales hidrolizadas y pantenol fortalece las fibras capilares, reduce la fragilidad y protege contra las agresiones externas. El filtrado de fermento de raíz de rábano actúa como un antioxidante natural que ayuda a mantener la salud del cuero cabelludo, mientras que la glicerina y el aceite de ricino proporcionan una hidratación profunda, dejando el cabello más suave, brillante y resistente. Además, este champú forma una capa protectora en la superficie del cabello, ayudando a prevenir la caída y devolviendo vitalidad y elasticidad. Es ideal para cabello tratado químicamente o debilitado, ya que limpia suavemente mientras nutre y repara.
Modo de empleo: Aplicar una cantidad adecuada sobre el cabello mojado, masajear suavemente hasta formar espuma y enjuagar bien.
Precauciones: Evitar el contacto con los ojos. En caso de contacto, enjuagar con abundante agua. Mantener fuera del alcance de los niños. Almacenar en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa.